Berger, John: Modos de ver.
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La vista llega
antes que las palabras. El niño mira y ve antes de hablar.
(…) La vista es
la que establece nuestro lugar en el mundo circundante; explicamos es mundo con
palabras, pero las palabras nunca pueden anular el hecho de que estamos
rodeados por él (…) el conocimiento, la explicación, nunca se adecua
completamente a la visión. El pintor surrealista Magritte comentaba esta brecha
siempre presente entre las palabras y la visión en un cuadro titulado La Clave de
los Sueños.+
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(…) Solamente vemos
aquello que miramos. Y mirar es un acto voluntario, como resultado del cual, lo
que vemos queda a nuestro alcance, aunque no necesariamente al alcance de
nuestro brazo. Tocar algo es situarse en relación con ello (…) Nunca miramos
sólo una cosa; siempre miramos la relación entre las cosas y nosotros mismos.
(…)
15-16
Una imagen es una visión que ha sido recreada o reproducida. Es una apariencia, o conjunto de apariencias, que ha sido separada del lugar y el instante en que apareció por primera vez y preservada por unos momentos o unos siglos. Toda imagen encarna un modo de ver.
Una imagen es una visión que ha sido recreada o reproducida. Es una apariencia, o conjunto de apariencias, que ha sido separada del lugar y el instante en que apareció por primera vez y preservada por unos momentos o unos siglos. Toda imagen encarna un modo de ver.
(…) aunque toda
imagen encarna un modo de ver, nuestra percepción o apreciación de una imagen
depende también de nuestro propio modo de ver.
Las imágenes Se
hicieron al principio para evocar la apariencia de algo ausente. Gradualmente
se fue comprendiendo que una imagen podía sobrevivir al objeto representado;
17
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(…) cuando se
presenta una imagen como una obra de arte, la gente la mira de una manera que
está condicionada por toda una Serie de hipótesis aprendidas acerca del arte.
Hipótesis O suposiciones que se refieren a:
la belleza
la verdad
la posición
Social
la forma
el gusto
la civilización
etcétera
Muchas de estas
hipótesis ya no se ajustan al mundo tal cual es. (El mundo tal cual es, es algo
más que un puro hecho objetivo; incluye cierta conciencia.) Salidas de una
verdad referida al presente, estas hipótesis oscurecen el pasado.
(…)
20
Como en tantos otros cuadros de Hals, las penetrantes caracterizaciones casi nos seducen hasta creer que conocemos los rasgos de la personalidad e incluso los hábitos de los hombres y mujeres retratados,
¿Qué “seducción" es esta de la que habla? Es simplemente la acción de los cuadros sobre nosotros. Pero ellos actúan sobre nosotros porque nosotros aceptamos el modo en que Hals vio a sus modelos. Y no lo aceptamos inocentemente. Lo aceptamos en la medida en que corresponde a nuestra observación de las personas, los gestos, los rostros y las instituciones. Esto es posible porque seguimos viviendo en una Sociedad de relaciones Sociales y valores morales comparables.
Como en tantos otros cuadros de Hals, las penetrantes caracterizaciones casi nos seducen hasta creer que conocemos los rasgos de la personalidad e incluso los hábitos de los hombres y mujeres retratados,
¿Qué “seducción" es esta de la que habla? Es simplemente la acción de los cuadros sobre nosotros. Pero ellos actúan sobre nosotros porque nosotros aceptamos el modo en que Hals vio a sus modelos. Y no lo aceptamos inocentemente. Lo aceptamos en la medida en que corresponde a nuestra observación de las personas, los gestos, los rostros y las instituciones. Esto es posible porque seguimos viviendo en una Sociedad de relaciones Sociales y valores morales comparables.
(…)
23
Hoy vemos el arte del pasado como nadie lo vio antes. Lo percibimos de un modo realmente distinto.
Hoy vemos el arte del pasado como nadie lo vio antes. Lo percibimos de un modo realmente distinto.
Podemos ilustrar
esta diferencia con el ejemplo de la perspectiva. La perspectiva estaba
sometida a una convención, exclusiva del arte europeo y establecida por primera
vez en el Alto Renacimiento, que lo centra todo en el ojo del observador. Es
como el haz luminoso de un faro, Sólo que en lugar de luz emitida hacia afuera,
tenemos apariencias que Se desplazan hacia dentro. Las convenciones llamaban realidad
a estas apariencias. La perspectiva hace del ojo el centro del mundo visible.
(…)
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Según la
Convención de la perspectiva, no hay reciprocidad visual. Dios no necesita
situarse un relación con los demás: es en sí mismo la situación. La
contradicción inherente a la perspectiva era que estructuraba todas las
imágenes de la realidad para dirigirlas a un solo espectador
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Tras la invención
de la Cámara Cinematográfica, esta contradicción se puso gradualmente de
manifiesto
Soy un ojo. Un
ojo mecánico. Yo, la máquina, os muestro un mundo del único modo que puedo
verlo. Me libero hoy y para siempre de la inmovilidad humana. Estoy en constante
movimiento. Me aproximo a los objetos y me alejo de ellos. Repto bajo ellos. Me
mantengo a la altura de la boca de un caballo que corre, caigo y me levanto con
los cuerpos que caen y se levantan. Esta soy yo, la máquina, que maniobra con movimientos
caóticos, que registra un movimiento tras otro en las combinaciones más complejas.
Libre de las
fronteras del tiempo y el espacio, coordino cualesquiera y todos los puntos del
universo, allí donde yo quiera que estén. Mi camino lleva a la creación de una nueva
percepción del mundo. Por eso explico de un modo nuevo el mundo desconocido para
vosotros. (Cita tomada de un artículo escrito en 1923 por Dziga Vertov, el revolucionario
director de cine soviético).
24-25
La Cámara aislaba apariencias instantáneas y al hacerlo destruía la idea de que las imágenes eran atemporales. O en otras palabras, la cámara mostraba que el concepto de tiempo que pasa era inseparable de la experiencia visual (Salvo en las pinturas). Lo que veíamos dependía del lugar en que estábamos cuando lo veíamos. Lo que veíamos era algo relativo que dependía de nuestra posición en el tiempo y en el espacio. Ya no era posible imaginar que todo Convergía en el ojo humano, punto de fuga del infinito.
La Cámara aislaba apariencias instantáneas y al hacerlo destruía la idea de que las imágenes eran atemporales. O en otras palabras, la cámara mostraba que el concepto de tiempo que pasa era inseparable de la experiencia visual (Salvo en las pinturas). Lo que veíamos dependía del lugar en que estábamos cuando lo veíamos. Lo que veíamos era algo relativo que dependía de nuestra posición en el tiempo y en el espacio. Ya no era posible imaginar que todo Convergía en el ojo humano, punto de fuga del infinito.
(…)
26
La invención de la Cámara cambió también el modo en que los hombres veían los cuadros pintados mucho antes de que la cámara fuese inventada. Inicialmente, los cuadros eran parte integrante del edificio al que iban destinados. En una iglesia o capilla del Alto Renacimiento, uno tiene a veces la sensación de que las imágenes que hay en sus muros son como grabaciones de la vida interior del edificio, de tal modo que constituyen en conjunto la memoria del edificio, hasta tal punto forman parte de la singularidad de este.
La invención de la Cámara cambió también el modo en que los hombres veían los cuadros pintados mucho antes de que la cámara fuese inventada. Inicialmente, los cuadros eran parte integrante del edificio al que iban destinados. En una iglesia o capilla del Alto Renacimiento, uno tiene a veces la sensación de que las imágenes que hay en sus muros son como grabaciones de la vida interior del edificio, de tal modo que constituyen en conjunto la memoria del edificio, hasta tal punto forman parte de la singularidad de este.
En otro tiempo la
unicidad de todo cuadro formaba parte de la unicidad del lugar en que residía.
A veces la pintura era transportable. Pero nunca se la podía ver en dos lugares
al mismo tiempo. La cámara, al reproducir una pintura, destruye la unicidad de su
imagen. Y su significación se multiplica y se fragmenta en numerosas
significaciones.
(…)
26-27
Gracias a la cámara, la pintura viaja ahora hasta el espectador en lugar de ser al contrario. Y su significación Se diversifica en estos viajes.
26-27
Gracias a la cámara, la pintura viaja ahora hasta el espectador en lugar de ser al contrario. Y su significación Se diversifica en estos viajes.
(…)
27
la unicidad del original radica en ser el original de una reproducción. Lo que percibimos como único ya no es lo que nos muestra su imagen; Su primera significación ya no estriba en lo que dice, sino en lo que es.
28
la unicidad del original radica en ser el original de una reproducción. Lo que percibimos como único ya no es lo que nos muestra su imagen; Su primera significación ya no estriba en lo que dice, sino en lo que es.
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Este nuevo status
de la obra original es una consecuencia perfectamente racional de los nuevos
medios de reproducción.
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En la era de la
reproducción pictórica, la significación de los cuadros ya no
está ligada a ellos; su significación es transmisible, es decir, se convierte
en información de cierto tipo, y como toda información, cabe utilizarla o
ignorarla; la información no comporta ninguna autoridad especial (…) la
reproducción hace posible, e incluso inevitable, que una imagen sea utilizada
para numerosos fines distintos y que la imagen reproducida, al contrario de la
original, se presta a tales usos.
(…)
34-35
En cambio, todos los elementos de un cuadro se ven simultáneamente. El espectador puede necesitar cierto tiempo para examinar uno a uno los elementos del cuadro, pero siempre que llega a una conclusión, la simultaneidad de la pintura toda está allí para refutarla o corroborarla. El cuadro conserva una autoridad propia.
En cambio, todos los elementos de un cuadro se ven simultáneamente. El espectador puede necesitar cierto tiempo para examinar uno a uno los elementos del cuadro, pero siempre que llega a una conclusión, la simultaneidad de la pintura toda está allí para refutarla o corroborarla. El cuadro conserva una autoridad propia.
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(…) una
reproducción, además de hacer sus propias referencias a la imagen de su
original, se convierte a su vez en punto de referencia para otras imágenes. La
significación de una imagen cambia en función de lo que uno ve a su lado o inmediatamente
después. Y así, la autoridad que conserve se distribuye por todo el contexto en
que aparece.
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3
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(…) los hombres actúan y las mujeres aparecen, Los hombres miran a las mujeres. Las mujeres se contemplan a sí mismas mientras son miradas. Esto determina no sólo la mayoría de las relaciones entre hombre y mujeres sino también la relación de las mujeres consigo mismas. El supervisor que lleva la mujer dentro de sí es masculino: la supervisada es femenina. De este modo se convierte a sí misma en un objeto, y particularmente en un objeto visual, en una visión.
(…) los hombres actúan y las mujeres aparecen, Los hombres miran a las mujeres. Las mujeres se contemplan a sí mismas mientras son miradas. Esto determina no sólo la mayoría de las relaciones entre hombre y mujeres sino también la relación de las mujeres consigo mismas. El supervisor que lleva la mujer dentro de sí es masculino: la supervisada es femenina. De este modo se convierte a sí misma en un objeto, y particularmente en un objeto visual, en una visión.
Hay una clase de
pintura europea al óleo cuyo tema principal y siempre recurrente son las
mujeres. Esta clase es el desnudo. En los desnudos europeos encontramos algunos
de los criterios y convenciones que han llevado a ver y juzgar a las mujeres como
visiones.
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